El efecto Xóchitl
A un mes del desplante del Presidente López Obrador a la Senadora Xóchitl Gálvez de negarle derecho de réplica en la mañanera, repunta en encuestas rumbo a la elección del 2024
Elisa Rodríguez
Desde hace exactamente un mes, la senadora Bertha Xóchitl Gálvez Ruiz (1963) se ha convertido en un fenómeno político y de comunicación que ha provocado lo que se ha dado en llamar la Xochitlmanía. Su presencia en las redes sociales, en los periódicos, en la radio y la televisión ha crecido de manera exponencial. Su historia y su figura es ahora un tema de conversación cotidiana.
Igualmente, en las últimas semanas desplazó al presidente López Obrador en el interés de búsqueda en las redes sociales, cosa que ocurre por primera vez desde que este asumió la presidencia.
La aparición de Xóchitl afianza la posibilidad de ver una contienda entre mujeres en junio de 2024. Y es que mientras que la senadora apareció de inmediato duplicando en intención de voto a Santiago Creel, Cabeza de Vaca o Beatriz Paredes, en Morena esa aparición hizo que Claudia subiera en intención de voto (a 11 de Ebrard) y ganara en cada uno de las mediciones por atributos.
Al enfrentarse, la lucha entre Claudia y Xóchitl luce atractiva. Diversas encuestadoras han emprendido mediciones, con diversos escenarios y cruces, cambiando al aspirante de Movimiento Ciudadano, y aunque por ahora en todos esos cruces gana Sheinbaum, Xóchitl logra lo que ningún otro aspirante de oposición había podido: ponerse a un número de solo una cifra de ventaja.
Todo esto inició el lunes 12 de junio, cuando el presidente López Obrador se niega a cumplir la orden de un juez que, después de ocho meses de trámites legales, otorgó a Gálvez el derecho de réplica, para presentarse en la comparecencia mañanera del presidente.
Esto para desmentir las palabras falsas que López Obrador había puesto en boca de la senadora. La negativa presidencial provocó una ola nacional de simpatía hacia Gálvez y también despertó el interés de la prensa nacional e internacional.
La reacción ciudadana y de los medios hizo que la senadora considerara la posibilidad de competir por la presidencia de la República en la elección de 2024. En diversas ocasiones había dicho que solo iría por la jefatura de gobierno de la Ciudad de México.
Desde hace un mes, han sido en total 28 veces las menciones por parte del presidente en las conferencias mañaneras, siempre de crítica, agresiva y misógina, hacia Xóchitl Gálvez, convirtiéndose, posiblemente sin querer, en su principal promotor que la ha colocado en el ojo de los mexicanos y más allá de las fronteras.
A tal grado que ya ha empezado a mencionarse la Xochitlmanía, y es que amplios sectores de la sociedad descontentos con el actual gobierno no veían a ningún candidato o candidata de la oposición con posibilidades reales de ganar la presidencia. De pronto, antes no lo habían considerado, surge ante sus ojos de improvisto Gálvez y ven que ella podría contender al tú por tú con cualquiera que sea el candidato de Morena.
Falta poco menos de un año para el día de las elecciones. Pendientes las definiciones de quiénes serán los aspirantes inscritos como candidatos rumbo al proceso electoral a la presidencia de 2024, donde se elegirá a quien relevará en el cargo a Andrés Manuel López Obrador.